QUIZAS NO SE COMO, PERO LO HARE

QUIZÁS NO SE COMO, PERO LO HARÉ...

Cuando el amor se presenta así, de repente, sin esperarse uno la mas mínima posibilidad de escape, la sorpresa fue mayúscula para él que no esperaba que un martes, por la tarde, después de tomar un helado en aquel establecimiento como lo había hecho en muchas otras ocasiones, como era costumbre cuando recién le habían pagado, como otros pensaba que el amor tenia que ser romántico, preparado, soñado, en fin en una y mil manera diferente a lo que tenia en frente suyo.

 Un fuerte silencio, porque si, el silencio también puede ser tan fuerte que nos puede dejar aturdidos, pero esta vez mas que silencio fue la falta de palabras, de respuestas lo que lo ha dejado así, mudo, atónito a lo que acababa de escuchar, pero pensó para si, quizás es un error, una falta de educación no poder decir nada pensó para si, pero que decir ante aquella escena.

Pequeño, inteligente, delgado, mojado, atemorizado y sudoroso, quizás por los nervios, el esfuerzo, el caminar, el calor, en fin, aquella persona había pronunciado minutos antes una serie de palabras que no le permitían aun decir nada; pensando en lo verdaderamente inevitable, lo miro fijamente y solo atino a decir, "como?", en verdad lo justo seria haber dicho algo inteligente, algo rebuscado desde lo mas profundo de su intelecto, para decir, como? no se necesita mucho seso, pero fue mas sincero, tanto que recibió una sonrisa que le desbarato cualquier intento de poner fin a aquel interminable momento.

Makio, así me llaman mis amigos, pero en verdad me llamo Anselmo como mi abuelo, Jacobo Anselmo Manrique Cordero, pero dime Makio, y te he dicho que quizás no sepa como, pero lo intento, intento ser un caballero, por eso hoy te he venido a buscar, pues creo que necesitas saber que me gustas y que quisiera poder acompañarte desde este momento, claro que si quieres puedo darte tiempo para que lo pienses, dame un plazo y yo volveré, "no, no, no es necesario", pero como que no es necesario, quizás unos 20 años para que madures y tengas claro lo que necesitas, quieres, deseas, pensó, pues debe tener, no se unos 12 años, quizás 14 si se da suficiente tiempo para verle con detenimiento, pero en verdad es joven, debe ser uno de esos arranques de juventud, de esos que dan cuando uno va conociendo el mundo.

Pero como decirle a esos ojos tan abiertos, que pareciera no quererse perder detalle alguno de la vida, a esa expresión de esperanza, y a esa sonrisa tiernamente nerviosa, ¿Cuántos años tienes chaval?, soy un hombre de 18 años, recién los cumplí hace 2 semanas, lo mire fijamente con dudas e incredulidad pero él ya había sacado el carnet de identificación, donde el certificaba que en verdad tenia esa edad, pero tan pequeño como un ratón, pero de mirada tan penetrante, tan intensamente hombre, es como si fuese un dulce concentrado.

Sonriente le pregunte, el porque pensaba que era la persona indicada para mi, y su respuesta me dejo mudo:

-porque se que puedo, y yo se que puedo porque yo lo he decidido,

 QUIZÁS NO SE COMO, AHORA,PERO LO HARÉ...CADA DÍA LO HARÉ...

Esto paso una tarde que parecía no pasar nada. Tan normal como cualquier otra, tan común como cualquiera.